El aumento de los precios no cubren las pérdidas por rendimiento

 El departamento económico de Confederaciones Rurales Argentinas realizó una relevamiento de la producción y comercialización vitivinícola nacional en plena "época de cosecha" que arroja que en el mercado local los precios pagados por las variedades tintas y blancas son los más altos de los últimos años y se encuentran muy por encima de la media. Esta situación que podría tomarse como una buena noticia tiene su justificación en la caída de los rendimientos medios por hectárea obtenidos en lo que va de la cosecha.

Los eventos climáticos sufridos como el granizo y las heladas tardías provocaron una demora en el comienzo de la cosecha reflejando una alta disminución en el stock vínico. Lo cierto es que estas heladas y el granizo (eventos que no se pueden controlar sino atenuar), sumado a la demora en la ejecución del Plan Estratégico Argentina Vitivinícola 2020 para el sector provocaron que la merma en la producción fuese localizada principalmente en aquellos productores que no cuentan con medidas de prevención y protección ante tales eventos (telas, aviones, bombas anti granizo).

Según lo relevado por CRA la inversión por hectárea tanto para las variedades tintas como blancas independientemente de la escala de producción es de entre $ 70.000 a $ 90.000 sin incluir estos mecanismos preventivos. Aquellos productores que por su tamaño o condición financiera han realizado dichas mejoras hoy se encuentran con rendimientos de entre 10.000 y 15.000 kg/ha. (siendo este un valor promedio habitual), mientras que aquellos sin estas medidas, está cosecha se encuentran en valores de 5.000 a 7.000 kg/ha para la uva blanca, y 4.000 a 6.000 kg/ha para la uva tinta.

La situación empujó los precios locales que para las variedades de uva tinta de mayor demanda (Malbec, Cabernet Sauvignon), hoy se ubican entre $ 20 a $ 25 /kg. dependiendo de su calidad. En aquellas variedades tintas de menor demanda (Merlot, Syrah), se registra un precio de venta de $ 18 a $ 22/kg también dependiendo de su calidad. Para las variedades blancas (Tempranillo y Bonarda) los valores oscilan entre $12 a $15 /kg.

Ciertamente, expone el informe de CRA, el aumento de los valores pagados no llega a cubrir la pérdida por rendimiento, y de cara al corto plazo la rentabilidad se verá seriamente afectada. Ese es el costo pagado por haber dejado pasar la oportunidad de ejecutar en tiempo y forma el Plan Estratégico.