Castagnani en la Expo Rural de Reconquista: "Al gobierno actual le decimos que no debe desperdiciar esta extraordinaria oportunidad de llevar adelante un cambio histórico en la vida de nuestro país"

 Nos vemos en la necesidad de aclarar de qué lugar hablamos. Como entidad, no hacemos política partidaria; llevamos adelante políticas gremiales. Hemos recibido con beneplácito las últimas medidas que anunció hace pocos días el Presidente de la Nación, referidas a la baja de un 25% en las retenciones para carnes vacuna, aviar y porcina, así como la eliminación de retenciones para la categoría de vacas y el sector lácteo. Son señales positivas para el sector. 

Pero, como entidad gremial, es nuestra responsabilidad institucional enumerar las dificultades que atravesamos desde hace muchos años. Estas realidades no son consecuencia de esta administración, pero existen. Creemos que el peor daño que se le puede ocasionar a un gobierno es decirle que todo está bien y ocultar la realidad.

En cuanto a las retenciones, el mismo Presidente de la Nación las catalogó como el peor impuesto. Por tal motivo, desde CRA pedimos que comencemos con un cronograma de reducción, como ya lo dijimos la semana pasada en Villaguay. Sería un logro histórico que el primer mandato del Presidente Milei finalice con la eliminación total de las retenciones. Seguramente, la respuesta inmediata del campo será duplicar la producción, porque sabemos hacerlo. 

Respecto a la ganadería, actividad que crea arraigo y permite que las familias rurales vivan en el campo, esta ganadería que invierte en genética, en capacitación, que crea puestos de trabajo y nos brinda la mejor carne del mundo, lamentablemente se enfrenta con limitantes comunes a todas las actividades. 

La falta de conectividad es uno de los principales motivos del éxodo de las familias rurales hacia las ciudades. La falta de mantenimiento de rutas y caminos rurales también es un problema; pensemos que toda la producción, todo lo que se ve en las góndolas, sale de un camino rural. Otra necesidad son créditos acordes a nuestra actividad. Es una herramienta esencial para nuestro sector, por lo que consideramos excelente la implementación de créditos a valor producto por parte de la provincia. 

Somos defensores del cuidado del medio ambiente, aunque somos víctimas de campañas de entidades fundamentalistas. Hoy, especialmente en ganadería, el balance entre lo emitido y lo captado es altamente positivo. Además, se ha descubierto que los árboles captan metano a través de bacterias en su corteza. Asimismo, ejercemos buenas prácticas agrícolas. 

Necesitamos fortalecer dos entidades fundamentales e indispensables para nuestro sector: INTA y SENASA. 

En cuanto a la vacunación contra la aftosa, desde CRA sostenemos que todo cambio o modificación debe contar con un aval técnico serio y riguroso. Hoy por hoy, para nuestra entidad es impensable dejar de vacunar. En este punto, las fundaciones cumplen una función muy importante. Son un sistema virtuoso y exitoso que logró combatir la fiebre aftosa. Pensar en desactivar este sistema es volver al pasado y poner en riesgo la sanidad de nuestros rodeos. Las fundaciones prestan un importante servicio al sistema sanitario. Antes de su existencia, la cobertura sobre nuestros rodeos era del 40%. En la actualidad, es del 96%, asegurando además la cadena de frío y, sobre todo, la seguridad en la aplicación de la vacuna y un sistema solidario. Debemos mencionar también que, si existen dificultades con algunas fundaciones, es necesario corregir y tomar las medidas necesarias para no poner en riesgo el sistema sanitario. Compartimos la política de importación de vacunas, siempre que se realice bajo las mismas condiciones para todos los interesados, lo cual es esencial para una competencia justa. 

Respecto a la identificación individual electrónica obligatoria, desde CRA no tenemos ninguna duda de que debe ser voluntaria. No podemos obligar al pequeño productor, o a aquel que no le interesa exportar, a asumir un costo innecesario. No hay argumento que, a nuestro entender, justifique la obligatoriedad. Hoy se nos exige cumplir ciertos requisitos para poder exportar, algunos de los cuales son difíciles de cumplir. No nos oponemos a lograrlos, pero no debemos ignorar que dentro de esos requisitos hay intereses políticos y económicos, tanto externos como internos. 

Por supuesto, quedan muchos temas pendientes: el tratamiento de los humedales, los bajos submeridionales, la ley de semillas, entre otros, en los cuales estamos trabajando. Permítanme dejar un mensaje para nuestra gente: las acciones gremiales comienzan con cada productor, en cada una de las rurales y confederaciones que forman CRA. Ustedes son fundamentales e imprescindibles en la vida de nuestra institución. Por todo lo expresado, les digo que desde CRA nuestro compromiso con ustedes es y será inalterable. 

A los ateneístas, les digo que es momento de trabajar por un país mejor. Me llevé una grata sorpresa cuando me comentaron desde Salta, donde en octubre llevaremos adelante el Congreso Nacional de Ateneos CRA, que ya contamos con casi setecientos jóvenes preinscriptos. Desde CRA estamos trabajando para agotar todos los recursos y lograr que todos los jóvenes que quieran viajar puedan estar presentes. A estos jóvenes, los invito a defender las economías regionales que crean arraigo. 

Defendamos este interior profundo, este interior productivo, este interior que nos enseñó que con honestidad, trabajo y producción podemos enfrentar cualquier situación, por más difícil que parezca. 

Al gobierno actual le digo: no debe desperdiciar esta extraordinaria oportunidad de llevar adelante un cambio histórico en la vida de nuestro país. Este pueblo argentino le dio los elementos fundamentales para que así sea: primeramente, el apoyo popular a través del voto; luego, la aprobación de la ley base y el pacto de mayo. 

Es hora, señor Presidente, y el campo lo va a acompañar haciendo lo que sabemos: producir cuidando la salud de la tierra, porque de ella vivimos, y es el legado que nos dejaron nuestros padres y abuelos, y es el que queremos dejar a nuestros hijos y nietos.