Protesta de tamberos en RafaelaAmenazan con tomar una planta láctea, pero en 15 días. Reclaman por el precio y la "situación" que atraviesa el sector, con una inflación de "casi 25 por ciento".
Una protesta tambera realizada en la ciudad santafesina de Rafaela, centro de una cuenca lechera importante en Sudamérica, derivó en la amenaza de tomar una planta láctea, pero recién dentro de 15 días. Al término de la movilización, que recorrió Rafaela y durante la cual se repartieron volantes en la planta láctea de Saputo, se hizo una asamblea de productores lecheros.
Reclamaron por el precio y la "situación" que atraviesa el sector, con una inflación de "casi 25 por ciento" y el consiguiente incremento de costos de insumos en dólares. Estuvieron los presidentes de Federación Agraria, Eduardo Buzzi; Sociedad Rural, Hugo Biolcati; Confederaciones Rurales Argentinas, Rubén Ferrero; y Coninagro, Carlos Garetto.
Además de seguir con este tipo de reclamos y asambleas en distintas cuencas lecheras, los asambleístas decidieron tomar una planta láctea dentro de "quince días", la cual aún no fue elegida pero pertenecerá al cordón lácteo de Rafaela. Otro de las protestas se centró en el proceso de concentración ya que crecen tambos grandes y cierran los chicos.
Entre los 400 manifestantes había ordeñadores que trabajan en campo alquilado y que están afectados por la situación. Garetto se refirió al aumento de los costos de la producción y manifestó que en algunos casos, "los insumos están dolarizados". En tanto, Biolcati, explicó que "la lechería es arraigo y trabajo genuino. Por eso, debería ser defendida, si no es por el gobierno nacional, por los gobernadores de las provincias tamberas", dijo hoy en Rafaela.
Afirmó que "el productor recibe el mismo precio que hace un año, mientras los costos aumentaron un 23% y el precio al
consumidor subió hasta un 30%". El dirigente pidió "terminar con los Registros de Operaciones de Exportación Lácteos (ROEL), ya que son un instrumento discrecional y generan incertidumbre a la hora de pensar en nuevas inversiones". Desde la industria se prometió un aumento del 7 por ciento a la leche cruda que los productores consideraron un avance pero insuficiente.
Una protesta tambera realizada en la ciudad santafesina de Rafaela, centro de una cuenca lechera importante en Sudamérica, derivó en la amenaza de tomar una planta láctea, pero recién dentro de 15 días. Al término de la movilización, que recorrió Rafaela y durante la cual se repartieron volantes en la planta láctea de Saputo, se hizo una asamblea de productores lecheros.
Reclamaron por el precio y la "situación" que atraviesa el sector, con una inflación de "casi 25 por ciento" y el consiguiente incremento de costos de insumos en dólares. Estuvieron los presidentes de Federación Agraria, Eduardo Buzzi; Sociedad Rural, Hugo Biolcati; Confederaciones Rurales Argentinas, Rubén Ferrero; y Coninagro, Carlos Garetto.
Además de seguir con este tipo de reclamos y asambleas en distintas cuencas lecheras, los asambleístas decidieron tomar una planta láctea dentro de "quince días", la cual aún no fue elegida pero pertenecerá al cordón lácteo de Rafaela. Otro de las protestas se centró en el proceso de concentración ya que crecen tambos grandes y cierran los chicos.
Entre los 400 manifestantes había ordeñadores que trabajan en campo alquilado y que están afectados por la situación. Garetto se refirió al aumento de los costos de la producción y manifestó que en algunos casos, "los insumos están dolarizados". En tanto, Biolcati, explicó que "la lechería es arraigo y trabajo genuino. Por eso, debería ser defendida, si no es por el gobierno nacional, por los gobernadores de las provincias tamberas", dijo hoy en Rafaela.
Afirmó que "el productor recibe el mismo precio que hace un año, mientras los costos aumentaron un 23% y el precio al
consumidor subió hasta un 30%". El dirigente pidió "terminar con los Registros de Operaciones de Exportación Lácteos (ROEL), ya que son un instrumento discrecional y generan incertidumbre a la hora de pensar en nuevas inversiones". Desde la industria se prometió un aumento del 7 por ciento a la leche cruda que los productores consideraron un avance pero insuficiente.