El feedlot comunitario que apuesta a seguir creciendo en Río NegroUn trabajo público - privado para potenciar la ganadería en el sur.
Durante la sequía que afectó a la provincia se reflejaron las dificultades de los productores para brindar suplementación a sus animales, ya sea por falta de recursos financieros, infraestructura o mano de obra.
Santiago Villalba, delegado del Ministerio de la Producción rionegrino, aseguró que "en el año 2008 se acordó iniciar la construcción de un encierre comunitario, en un predio de 20 hectáreas donado por la familia Zubieta (ganaderos de la localidad)".
Con el recupero de los recursos que se habían destinado a financiar suplementación estratégica (de vientres y destete precoz) a aquellos productores que estaban en condiciones de hacerlo, se iniciaron la primeras obras.
En el año 2013 se realizaron las inversiones definitivas y se inauguró el predio en el mes de septiembre con una capacidad de 1.200 animales. Durante el 2014 se duplicó su capacidad.
A través de fuentes de financiamiento, como el recupero de créditos otorgados para suplementación estratégica durante la sequía (2008-2013); los aportes no reintegrables de $1.500.000: Proveniente del MAGyP de la Nación para la compra de la infraestructura y alimento necesario para la puesta en marcha del encierre (2013) y los aportes no reintegrables de $750.000: Proveniente del Programa Ganadero Bovino de Río Negro, para ampliar la capacidad del encierre.
El objetivo general fue poner en funcionamiento un centro de acopio de hacienda, público-privado, donde los productores ganaderos puedan llevar sus animales a los fines de que sean destetados, recriados, engordados o inseminados en función de las necesidades coyunturales de la actividad ganadera provincial.
Con los objetivos específicos de generar valor agregado en la cadena de la carne vacuna, engordando en la región animales que históricamente se "expulsaban"; incrementar la rentabilidad de los productores; avanzar en los procesos de integración de la cadena de la carne y brindar alternativa ente eventuales emergencias agropecuarias.
En el feedlot, los terneros y novillitos son las principales categorías a suplementar.
La alimentación es a base de maíz, ya que es la base de la suplementación energética y de esta manera se procura trabajar con producto de la zona.
Además, se cuenta con un suplemento proteico, el cual es adquirido a plantas del norte de la región.
El producto que se comercializa son novillos terminados para faena y terneros/as recriados.
En los comienzos, el feedlot se abastecía al consumo interno de la norpatagonia. Faenando tanto en el frigorífico municipal de Luis Beltrán como en la Coop. J.J. Gómez en General Roca.
Mientras que actualmente es posible abastecer parte de la demanda de animales terminados a la industria de la zona andina y de las provincias del sur (Chubut, Santa Cruz).
Para el futuro, se observa la posibilidad de que a largo plazo se contempla la posibilidad de acceder a mercados, principalmente ante la posibilidad que paguen un valor diferencial por provenientes de una zona libre de fiebre aftosa sin vacunación, con sello patagónico.
Hasta ahora, del proyecto han participado del proyecto 159 productores y pasaron por el encierre unos 15.000 animales.
Otro dato a tener en cuenta es que se logra un agregado de valor entre 15-30%.
Además, en un año de funcionamiento se generó valor agregado (descontado los gastos) por más de $8.000.000, los cuales fueron apropiados por pequeños y medianos productores.
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Durante la sequía que afectó a la provincia se reflejaron las dificultades de los productores para brindar suplementación a sus animales, ya sea por falta de recursos financieros, infraestructura o mano de obra.
Santiago Villalba, delegado del Ministerio de la Producción rionegrino, aseguró que "en el año 2008 se acordó iniciar la construcción de un encierre comunitario, en un predio de 20 hectáreas donado por la familia Zubieta (ganaderos de la localidad)".
Con el recupero de los recursos que se habían destinado a financiar suplementación estratégica (de vientres y destete precoz) a aquellos productores que estaban en condiciones de hacerlo, se iniciaron la primeras obras.
En el año 2013 se realizaron las inversiones definitivas y se inauguró el predio en el mes de septiembre con una capacidad de 1.200 animales. Durante el 2014 se duplicó su capacidad.
A través de fuentes de financiamiento, como el recupero de créditos otorgados para suplementación estratégica durante la sequía (2008-2013); los aportes no reintegrables de $1.500.000: Proveniente del MAGyP de la Nación para la compra de la infraestructura y alimento necesario para la puesta en marcha del encierre (2013) y los aportes no reintegrables de $750.000: Proveniente del Programa Ganadero Bovino de Río Negro, para ampliar la capacidad del encierre.
El objetivo general fue poner en funcionamiento un centro de acopio de hacienda, público-privado, donde los productores ganaderos puedan llevar sus animales a los fines de que sean destetados, recriados, engordados o inseminados en función de las necesidades coyunturales de la actividad ganadera provincial.
Con los objetivos específicos de generar valor agregado en la cadena de la carne vacuna, engordando en la región animales que históricamente se "expulsaban"; incrementar la rentabilidad de los productores; avanzar en los procesos de integración de la cadena de la carne y brindar alternativa ente eventuales emergencias agropecuarias.
En el feedlot, los terneros y novillitos son las principales categorías a suplementar.
La alimentación es a base de maíz, ya que es la base de la suplementación energética y de esta manera se procura trabajar con producto de la zona.
Además, se cuenta con un suplemento proteico, el cual es adquirido a plantas del norte de la región.
El producto que se comercializa son novillos terminados para faena y terneros/as recriados.
En los comienzos, el feedlot se abastecía al consumo interno de la norpatagonia. Faenando tanto en el frigorífico municipal de Luis Beltrán como en la Coop. J.J. Gómez en General Roca.
Mientras que actualmente es posible abastecer parte de la demanda de animales terminados a la industria de la zona andina y de las provincias del sur (Chubut, Santa Cruz).
Para el futuro, se observa la posibilidad de que a largo plazo se contempla la posibilidad de acceder a mercados, principalmente ante la posibilidad que paguen un valor diferencial por provenientes de una zona libre de fiebre aftosa sin vacunación, con sello patagónico.
Hasta ahora, del proyecto han participado del proyecto 159 productores y pasaron por el encierre unos 15.000 animales.
Otro dato a tener en cuenta es que se logra un agregado de valor entre 15-30%.
Además, en un año de funcionamiento se generó valor agregado (descontado los gastos) por más de $8.000.000, los cuales fueron apropiados por pequeños y medianos productores.
