Otro impuesto más al agroComunicado de la Sociedad Rural de Rosario.
Llama la atención la falta de conocimiento que tienen nuestros legisladores provinciales acerca de deteriorada situación económica que está atravesando el agro santafesino. A los magros resultados físicos de la cosecha gruesa pasada, se le suman el mal estado de los cultivos invernales, producto de las inclemencias climáticas, a saber: sequía, heladas tardías y granizo. Y esto hace incierto el resultado productivo de la cosecha fina. La producción de carne y leche también está padeciendo la falta de pasto primaveral. Cabe destacar, que los precios en el mercado internacional de los granos actuales, cotizan a la mitad del valor de 10 años atrás.
Frente a este escenario de fragilidad económica sectorial, la legislatura provincial, introduce una nueva alícuota impositiva, que en su origen se aplicara a las cerealeras, y expendedores de insumos agrícolas, las cuales en el corto plazo, se trasladaran al bolsillo del productor.
Comprendemos en nuestra entidad, la compleja situación que enfrenta el transporte urbano e interurbano de pasajeros, pero entendemos que el agro, ahogándose, ya aporta toda su capacidad tributaria en detrimento de su posibilidad básica de inversión.
Hoy la provincia cuenta con un consolidado superávit fiscal en sus cuentas públicas. Por lo tanto, la manera real de disminuir la pobreza, crecer y desarrollarse en el mundo es "bajando impuestos", permitiendo la inversión y creación de puestos de trabajo productivos.
Señores gobernantes podrían hacer un esfuerzo de austeridad y ajustar su presupuesto, para así, no incrementar a los contribuyentes santafecinos con nuevos tributos, actuando en consecuencia a la realidad y necesidad de estos tiempos.
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Llama la atención la falta de conocimiento que tienen nuestros legisladores provinciales acerca de deteriorada situación económica que está atravesando el agro santafesino. A los magros resultados físicos de la cosecha gruesa pasada, se le suman el mal estado de los cultivos invernales, producto de las inclemencias climáticas, a saber: sequía, heladas tardías y granizo. Y esto hace incierto el resultado productivo de la cosecha fina. La producción de carne y leche también está padeciendo la falta de pasto primaveral. Cabe destacar, que los precios en el mercado internacional de los granos actuales, cotizan a la mitad del valor de 10 años atrás.
Frente a este escenario de fragilidad económica sectorial, la legislatura provincial, introduce una nueva alícuota impositiva, que en su origen se aplicara a las cerealeras, y expendedores de insumos agrícolas, las cuales en el corto plazo, se trasladaran al bolsillo del productor.
Comprendemos en nuestra entidad, la compleja situación que enfrenta el transporte urbano e interurbano de pasajeros, pero entendemos que el agro, ahogándose, ya aporta toda su capacidad tributaria en detrimento de su posibilidad básica de inversión.
Hoy la provincia cuenta con un consolidado superávit fiscal en sus cuentas públicas. Por lo tanto, la manera real de disminuir la pobreza, crecer y desarrollarse en el mundo es "bajando impuestos", permitiendo la inversión y creación de puestos de trabajo productivos.
Señores gobernantes podrían hacer un esfuerzo de austeridad y ajustar su presupuesto, para así, no incrementar a los contribuyentes santafecinos con nuevos tributos, actuando en consecuencia a la realidad y necesidad de estos tiempos.